Ponte
por un segundo en mi lugar, sólo un segundo. Intenta comprenderme. Yo lo he
hecho muchas veces, y créeme, no ha sido nada fácil.
Hablaste
mucho de amistad eterna y esas cosas que siempre se prometen para no cumplir,
pero creo que tu concepto de amigo es muy distinto al mío. Deberías entenderme
bajo cualquier circunstancia, y aunque te pese, respetar mis decisiones. Pero
no, no lo haces, sigues haciendo lo crees que está bien, sigues echando las
cosa en cara, y deberías saber que eso no ayuda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario